domingo, 27 de mayo de 2007

El factor diferencial

27-05-07

Querido diario:

Siempre me ha gustado fijarme en la gente y en su comportamiento, no sé si porque soy un poco voyeur o simplemente, un sociólogo frustrado. El caso es que disfruto de las conductas del llamado “animal humano”. Y sobre todo me gusta fijarme en la juventud, que está a medio camino entre el adulto responsable y el más caprichoso de los impúberes. Muchas veces nos rasgamos las vestiduras y gritamos al viento, hablando de nuestras libertades, y nuestro derecho al disfrute, al fin y al cabo, nunca seremos tan jóvenes como hoy. Pero las conductas que puedes ver un sábado a la noche dejan en muy mala posición al joven, sobre todo al joven macho. Grupos de jóvenes que se dedican, en la calle y a altas horas de la noche, a cantar gritando, golpear vallas de metal cual tambores u orinar en los portales. Nos estamos quejando de que la directiva europea obliga a cerrar los bares y pubs a la una y media de la noche, pero no nos paramos a pensar que la culpa es nuestra, que nos comportamos como verdaderos energúmenos. Mientras no consigamos pensar en los vecinos y respetar a los demás, tenemos muy crudo que se nos respete nuestro tiempo de “ocio”.

Por otro lado, hoy quería cavilar sobre otro proceder del joven macho. El ligue. Me he dado cuenta de que el joven generalmente no sabe acercarse al género femenino. Y ya no es que ellas sean duras, bordes o difíciles, al fin y al cabo es un modo de protección que han ido adquiriendo tras años de acoso y derribo. He visto grupos de tíos atacar a otra cuadrilla de chicas de manera individual, como el jaguar, o colectiva, como el lobo, pero siempre con el mismo resultado. No consiste en “atacar”, sino en seducir. Por eso hablo del factor diferencial. A veces, sin saber por qué, un individuo lo tiene. No será un chico alto, ni guapo, ni demasiado simpático, pero conseguirá su objetivo, simplemente con labia, respeto y saber estar. Una mirada, un gesto tranquilo y sin agresividad, un comentario afortunado basado en la observación, hará que la chica en cuestión no te vea como una amenaza, y por lo tanto baje las defensas. Y es ahí donde comienza a actuar el arte de la seducción. Primero, una conversación interesante pero superficial, no demasiado profunda, que sea divertida e intrascendente, al fin y al cabo, estas de marcha y quieres pasarlo bien. Nunca intervengas cuando tu objetivo esté hablando con las amigas, porque seguro que le interesa más que lo que tú le vayas a contar. Intenta llamar su atención con miradas, sonrisas, algún gesto…. Si le interesa hablar contigo, te lo hará saber. Recuerda, ser simpático no es decir chistes todo el rato, es conseguir que a la otra persona le interese lo que dices. Y sobre todo, no tengas prisa, tu objetivo no debe ser llevártela a la cama esa noche, al fin y al cabo, no sabes en qué situación se encuentra, y siempre es mejor tener una amiga receptiva que no un rechazo por haber ido demasiado rápido. Y de todas formas, si a ella le interesa pasar a algo más caliente, te lo dirá claramente.

En fin, querido diario, que es una lástima que cuando eres joven y puedes disfrutar de las relaciones no sepas hacerlo, y cuando ya tienes suficiente experiencia como para destacar, ya se haya pasado el momento.

8 comentarios:

◈lunaluna◈ dijo...

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Anónimo dijo...

Pamplinas!. El respeto no depende de la hora de la noche a la que cierren los bares. El que mea en el portal, lo mismo lo va a hacer a la 1.30 que a las 5.30 de la mañana. Además igual de mal está que el joven macho se mee en el portal, que que la jóvena hembra se dedique a llamar a los portales a altas horas de la madrugada (visto ayer también). Vale que no vayan dando pataditas a las bolsas de basura, pero liarla también la lían.

Y sobre lo de los métodos de ligue, pues que quieres que te diga... lo que dices sobre el papel está muy bien, ninguna te va a decir que no le guste que la traten así. Hasta probablemente consigas pasar un rato agradable con ella. Pero no nos engañemos, a ciertas edades, ellas buscan el macho alfa y el macho alfa no es el que las entretiene si no el caradura peligroso. Las hormonas son asin. A la de unos años, que ya no toca tener los hijos, si no criarlos, las cosas cambian...

Er Pi - dijo...

No vi yo lo de la tia esa... pero bueno, tienes toda la razón. Lo que ocurre es que nosotros tendemos a ser mas... ruidosos.
Y también te doy la razón con lo del macho alfa, pero solo a ciertas alturas del mes... ya sabes

Anónimo dijo...

¡Atención chicos que voy!

Quien mejor para hablar de las mujeres que una entendida en el tema o sea, una mujer, yo mismamente.

Tenéis razón en ciertas ocasiones cuando comentáis que hay tías muy bordes, yo he sido testigo, lo reconozco.

Pero el problema principal es el acercamiento y la figura masculina que seguís manteniendo y debería estar desechada hace muchos años. La palabra clave es “evolución”.

¡Estamos en el siglo 21! No tiene importancia si se acerca el tío a la tía o la tía al tío. No soporto esa aptitud de machoman que te encuentras muchos sábados a la noche, sinceramente, me da la risa... es absurdamente ridícula.

Me gustan los chicos naturales, la simpatía, el poder hablar os olvidáis en muchísimas ocasiones que somos personas igual que vosotros, tenemos sentimientos y nos gusta que nos traten como a personas.

Muchos sábados te encuentras a los típicos tíos que solo van a follar, o son francamente "inútiles" a la hora de un acercamiento, incluso groseros.

Muchos tíos majetones ni siquiera se te acercan... y es una pena, pero por timidez, miedo al rechazo y otra serie de complejos absurdos, te pierdes de conocer chicos estupendos.

La gran mayoría de los hombres que me han parecido encantadores no les he conocido un fin de semana sino en cursos, trabajo, amigos de amigos/as, etc.

Adoro la simpatía, la originalidad, la naturalidad, el buen humor y otra serie de cualidades que normalmente no se ven a primera vista. Me puede gustar un físico alrededor de 1 minuto pero si al minuto siguiente no tiene nada interesante que decir paso de él.

Me puede seducir una sonrisa bonita, un gesto de apoyo cuando lo necesito o un amigo sincero y no un imbécil que va de supermegaguay el fin de semana intentando "echarse encima de ti" o "hacerse el interesante", cuando de interesante no tiene absolutamente nada y lo puedes comprobar en 5 segundos. A estos individuos les diría ¡No insultéis la inteligencia femenina, por favor!

Anónimo dijo...

El acercamiento, ese gran desconocido: tienes 15 segundos para ser el tipo más interesante del mundo o quedar como un baboso impresentable. Lo gracioso, es que no sólo depende de lo que digas y de cómo lo digas...(supongo que nuestro amigo eunuco sabrá por donde voy).

De todas formas, es gracioso Marisa que primero digas que estamos en el siglo XXI y que tenemos evolucionar. Pero al momento que sea una pena que chicos majetones no se acerquen. Siguiendo el argumento, lo mismo es un evolucionado que está esperando que seas tú la que te acerques :-P.

Por otro lado, completamente de acuerdo con que un garito lleno de gente, con un ruido ensordecedor no es el mejor lugar para intentar hablar tranquilamente. Pero cuidado con pasarte de hablador y atravesar la frontera del tercer café. Porque en cuanto pases de ahí te conviertes en el amigo que digo amigo, en el "AMIGO" y lo único que vas a hacer es llevarte malos ratos...

Resumiendo, en el punto medio está la virtud. Ni ser el más cabrón del barrio, ni una hermanita de la caridad. Y en caso de duda, tirar siempre por la opción más caradura (mira tú, un pareado! esta me la apunto!!).

Anónimo dijo...

Ahí te voy a sorprender Patxo porque yo si me acerco a conocer y lo puedes comprobar fácilmente si quieres porque te lo puede decir cualquiera que me conoce. Yo "me mojo el culo", no me quedo esperando ningún príncipe azul ni me interesan esas chorradas, solo pretendo conocer un tío con el cual tenga afinidad y me aporte como persona, alguien para quien la pareja sea un 50% de cada uno, no un 10% de uno y el 90% del otro.

Los fines de semana voy a hablar con la gente y realmente en muchas ocasiones me he sentido como "un bicho raro" con ciertas personas, que habitualmente suelen quejarse de "lo cerrada que es la gente en Vitoria", curioso ¿no?.

Yo cuando me acerco no voy con idea de "echar un polvo" simple y llanamente voy a conocer pero la mayor parte de los tíos actuales no están aun preparados para alguien como yo, tienden a asustarse o a pensar "cosas extrañas", no me siento comprendida y creo que la situación "les viene muy grande" a muchos de ellos, no a todos porque con algunos he tenido experiencias muy positivas, esto también hay que decirlo.

Yo tengo 36 años y me voy encontrando muchos tíos (no digo todos) de mi edad con la misma mentalidad que tenía mi abuelo, no exagero una pizca. Mi abuelo era
un personaje hipermachista y como te puedes imaginar esta aptitud en un hombre esta muy lejos de provocarme atracción y muy cerca de provocarme una repulsión total y absoluta mi abuela realmente fue una persona “muy sufrida” por decirlo de algún modo suave.

A los hombres os asusta mucho la palabra “amigo” pero te diré que si un hombre no es primero mi amigo difícilmente va a ser nada más. Considero la amistad la base de una buena relación, sin amistad no existe mucho sentimiento por mi parte. Los amigos están para apoyarte, escucharte, comprenderte… si un tío es incapaz de hacerlo conmigo se puede ir olvidando de todo lo demás porque no me interesa para nada. Por supuesto no estoy pidiendo nada que no este dispuesta a ofrecer.

Y a estos chicos majetones que comento como comprenderás los conozco porque yo me he acercado a conocerlos, de otro modo no sabría que son unos tíos majos ¿no te parece?. No hablo por hablar...me baso en hechos muy concretos, en mis propias experiencias.
Pero el que quiere peces tiene que “mojarse el culo” sea hombre o mujer y has de reconocer que últimamente los chicos estáis “muy comodones”, eso no es bueno…

A muchos tíos que conozco les gusta mucho estar en casa de la amatxu y no les interesa tener pareja, ni hacer su vida, ni nada y te estoy hablando de tíos que tienen su puesto estable, su piso, etc. Están en una situación propicia para hacerlo y no lo hacen.

Las mujeres no queremos “adolescentes”, queremos hombres hechos y derechos, me importa muy poco que lea tebeos de Mortadelo y Filemón o vea películas de Walt Disney seguramente yo le acompañaría encantada pero a la hora de la verdad, cuando hay que afrontar problemas que tenga lo que tiene que tener de hombre y de cara en las situaciones difíciles porque yo si lo hago y muchos se escaquean a la francesa.

Anónimo dijo...

Pues muy bien por ti, pero me da a mi que eso de entrarle a los tíos no es la norma general. Aunque también puede ser que yo no sea "entrable", vaya usté a saber!.
Y no me extraña nada que alguno se te asuste... ya sabes, acostumbrados a miraditas por encima del hombro y cerramientos varios, pues se caen los esquemas al suelo y no sabes reaccionar ;).

Sobre lo de que te llamen o te dejen de llamar amigo... A mi que me lo digan no me asusta eso sí, creo que el término está muy devaluado. La palabra que realmente me da un pánico atroz es la de majo y sus diversas variantes. Con esa si que he tenido malas experiencias y salgo corriendo cual alma que lleva el diablo. Es un mecanismo de defensa como otro cualquiera ;).

Por lo demás completamente de acuerdo contigo. Cada día estamos más comodones. Pero según lo veo yo, las razones son mucho más profundas que todo esto que estamos comentando. Y van desde pérdida de valores, hasta razones económicas pasando por egoísmo puro y duro. Somos la generación más preparada y en lugar de tirar para arriba, vamos a terminar por debajo de los niveles de nuestros padres.

Es un poco offtopic pero acabo de ver un anuncio de hipotecas a 45 años. Según me da a mi en la nariz no creo que se pueda pagar la hipoteca con 70 tacos teniendo en cuenta como están las pensiones. Claro que en aquellos años lo más seguro es que de las pensiones solo se acuerden los profesores de historia.

Anónimo dijo...

yo juraria que John Smith es el de las zapatillas