martes, 2 de septiembre de 2008

6 gambas por 30 Euros en el Puerto de Alicante VS docena y media por un Euro en el de Laredo

02-09-08

Querido Diario:

En esto se pueden resumir mis vacaciones.

Las apenas dos semanas que he decidido coger me han sabido a gloria, naturalmente, y se pueden resumir en la simple frase que titula este apunte, y que es el episodio que he decidido contarte, mi Querido Diario.

Te explicaré las dos situaciones, para que puedes elegir aquella que mas te guste. A la derecha aparecerá un listado para que puedas votar.

1º 6 gambas por 30 Euros en el puerto de Alicante:

Pues bien, uno de los pocos días que pasé en el levante, Laura y yo decidimos hacer una excursioncita a ver el precioso pueblo de Altea, con sus maravillosas vistas y su excepcional mercado de artesanía y parar a cenar en Alicante. Siempre solemos ir una noche,para comer una ración de chanquetes fritos (pescaíto)que a Laura le gustan mucho.
Esa noche decidimos sentarnos en la terraza de una freiduría del puerto deportivo, porque hacía una noche fantástica, unos 26 graditos, despejado completamente y tranquilo, porque era justo cambio de mes, y había poca gente. Desde la mesa se veían los elegantes y carísimos barcos de recreo y las luces de la ciudad se reflejaban en el agua. El castillo se erguía iluminado en lo alto de la peña como protegiéndonos.

El menú que pedimos fué el siguiente:
- Chanquetes fritos.
- Coquinas.
- Bandeja de marisco cocido (langostinos, quisquillas, cigalas...)
- Y para tomar algo caliente decidimos pedir unas gambas al ajillo.
- ¿Cuantas gambas queréis? me preguntó el camarero. - pues, unas 6, dije yo confiado. serían suficientes, dado que la bandeja traía bastante comida.

Empezamos a comer y ellos esperaron hasta el final para traernos las gambas. lógico,pensé, para que no se enfríen.

Cuando vi las gambas casi me da un infarto. Aquello no eran gambas, eran monstruos.
Las cabezas eran del tamaño de langostinos, y con las antenas se podían hacer cabos para atar transatlánticos. Además después de haber comido todo lo demás, creíamos que serían ellas las que nos comerían a nosotros y no al revés.

Cuando vimos la cuenta casi nos da un algo. Nos habían cobrado la gamba, LA UNIDAD! a 5 Eurazos. Pero bueno, estábamos de vacaciones y un día es un día...



2º Docena y media en el Puerto de Laredo.

La segunda quincena de agosto, los padres de Laura suelen ir a Laredo, y nosotros vamos a pasar los fines de semana con ellos. Generalmente salimos a la una, tras cerrar la tienda y volvemos el domingo después de desayunar.

Los días suelen ser bastante iguales todos, desayunar pronto, un rato de playa, paseo por el pueblo, vermouth, comer, siesta, paseo de nuevo por la feria de artesanía y el paseo marítimo, cena, paseo y a dormir.

Por lo que nos concierne es la hora del vermouth. Solemos tomas un par de ellos cambiando de bares, y tomando pintxos, pero siempre acabamos en el mismo, el bar LA CASONA, muy cerquita de casa y del puerto. Lo bueno que tiene ese bar es el trato, porque ya nos conocen, y sobre todo, el precio. Tomar 3 mostos, un vino y un marianito, con una ración de gambas, unas 20, puede salir por 5 euros. La ración de gambas a la plancha es 1 Euro. Los caracolillos, 3, lo mismo que los rejos o los calamares. Merece la pena.

Tal vez las vistas no sean las mismas, pero la temperatura, el trato de la gente, el ambiente... no tienen nada que ver.

Por todo ello, tal vez la elección para ti sea fácil, mi Querido Diario, tal vez elegirías las gambas de Laredo, yo haría lo mismo en tu lugar, pero mirando muy profundo en mi interior, cada vez que recuerdo las de Alicante, siento un placer mucho más intenso... Repetiré.