jueves, 17 de mayo de 2007

Nunca dejamos atrás a uno de los nuestros

18-05-07

Querido diario:

En las películas americanas de guerra, cada vez que un soldado es herido, o un piloto abatido, mueven roma con Santiago para encontrarlo. A veces incluso poniendo en peligro a mas de una persona en la búsqueda. Esto, que a primera vista puede parecer ilógico, tiene que ver con la naturaleza social de los humanos. Estamos empeñados en destruirnos los unos a los otros, pero, en cambio, damos una importancia extrema al grupo. Nuestro pequeño universo relacional es lo que más cuidamos, los que llamamos “los nuestros” merecen toda nuestra atención.

Es curioso como lo bélico hace que nos sintamos mucho más unidos. Esta semana se está planteando en mi trabajo el realizar un partido de futbol sala y después una cena. Traduzco, una batalla, y después un festín. Necesitamos una confrontación, aunque sea lúdica como en este caso, seguida de un acto social de primer grado para sentir que estamos cerca unos de otros. Las cenas, y posteriores festividades (bokata y kinito) nos ayudan a conocernos fuera del ambiente de trabajo, agresivo por naturaleza, y nos abre un espacio para el conocimiento personal, diferente del laboral. Generalmente estas cenas unen, y a veces no solo en el plano profesional… no sería la primea vez que una de estas celebraciones termina con otra “celebración” de distinta índole, entre dos (o más) personas del grupo que jamás pensarían que eso podría suceder…

Pensándolo bien, seguro que más de uno, o una, está pensando desde otra perspectiva el ir, o no, a las celebraciones post-hostilidades.

Y qué coño, a lo mejor hay tiki-taka, en la cancha y fuera de ella….

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Parece que estés definiendo una orgia je..je.. je.. ¡que es una simple cena de curro, hombre!

¿Qué va a pasar? y si pasa ¿que? pues si hay dos que se gustan y eso... es su problema ¿por que no? muchas parejas salen de ambientes de curro y funcionan bien, de hecho funcionan mejor que otras porque se conocen bastante más y tienen más en común.

De todos modos no creo que la gente vaya con intención de nada, salvo pasarlo bien, pero los sentimientos y a veces las hormonas dan sorpresas, es normal... ¡somos humanos!.

Yo ya he estado en muchas cenas y he visto de todo, sinceramente... uniones y desuniones...

Lo importante es hablar, bailar, pasarlo bien y no pasarse con el alcohol y las drogas…. que luego te arrepientes…

Julián dijo...

Bueno, bueno, bueno... alcohol, drogas.. solo falta que venga luzu y mezclamos también el rock & roll...

Anónimo dijo...

Cuidadín con esas cenas/fiestas/celebraciones/reuniones , que son peligrosas. Normalmente siempre hay alguien que acaba desfasando demasiado y que se convierte en el centro de los comentarios en el trabajo al dia siguiente. Lo cual, por otro lado, suele ser divertido, siempre que no seas tú el "criticau"...

A mi me gustan. Es una forma de conocer un poquito más a la gente que te rodea, de soltarse un poco. Y porqué no, de reirse un ratito viendo a tu gerente con una copita de más perder el norte bailando el paquito el chocolatero o la conga.. Todo un espectáculo! Y me consta que por aquí hay varios que saben de lo que hablo..

Moran dijo...

Soy un agresivo defensa que no deja pasar ni una, cuida tus espinillas... eso sí, si te lesiono luego te pago un cubata, y así demostramos tu teoría. ;)